Jazz en Claypole, el arte sin fronteras
Jazz en Claypole, el arte sin fronteras

Jazz en Claypole, el arte sin fronteras

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La música estimula los estados de ánimo. Hay melodías y ritmos que provocan determinados efectos y situaciones, siempre hablando en forma subjetiva, ya que muchas veces son estímulos de imágenes de un pasado diferente para cada oyente. De todas maneras, algunas melodías culturalmente han dibujado un entorno especifico, muy asociado a cierto gusto musical sofisticado.

El jazz es disruptivo, construye y destruye, implosión y explosión, casi al unísono; y aquel que así lo siente, aprende de sus tiempos y sintoniza anímicamente con él.

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Hay estereotipos que se construyen y se instalan en el inconsciente colectivo, muchas veces configuran con el tiempo un mito a sostener: una parte verdad y otra es creación popular. Este excelente documental registra exactamente lo que pasa en su territorio. Comienza con un experimento auditivo. En una plaza y a diferentes personas se les ofrece un auricular para escuchar lo que no saben, allí esta sonado. Esta imágen actúa de metáfora para lo que supuestamente puede ser el llevar Jazz a lugares donde y a priori, los oídos estan acostumbrados a otros sonidos y armonías

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El jazz: un género que nacido en los guetos negros estadounidenses acaba siendo apropiado por la burguesía blanca y hacerlo digerible solo por una pequeña élite, hasta convertirlo en sinónimo de cultura “cool” de un pequeño grupo privilegiado. Claypole: un barrio típico del conurbano sur bonaerense, con gran parte de sus necesidades básicas insatisfechas y alejado de cualquier tipo de oferta cultural genuina y sistemática.

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¿Es posible el encuentro de estas dos realidades? El documental narra la experiencia de reapropiación del género por un suburbio olvidado mediante la organización del festival JAZZ EN CLAYPOLE durante los años 2012 y 2013, que convocó grandes nombres nacionales e internacionales e involucró a los vecinos que generosamente abrieron sus puertas a la propuesta y participar.

El documental es tan genuino como un clase didáctica sobre el tema. Las primeras imágenes nos muestran a un músico que cuenta las pocas veces que tuvo la oportunidad de salir de su barrio y escuchar música en algún teatro. La casa es una vivienda humilde y su testimonio es transparente y disparador de lo que vendrá. El relato de la historia del jazz, como música representativa de minorías negras, luego tomada por la industria musical para su exportación con sentido comercial y político, esta en palabras de entendidos en la materia con verdaderos conocimientos.

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Por otro lado y alternando el relato, estan las palabras de sorpresa de algunos otros músicos que verdaderamente no entienden que hace el jazz allí. Prejuicios o simplemente experiencia de conocer el territorio? Las dos cosas, y ambas se derriten al calor de los sonidos en cada presentación en el escenario. Nada hace de barrera a lo que la necesidad de la gente autoriza a entrar. Algunos lo llaman milagro, pero no lo es. Es la fuerza de arte en movimiento e impulsado por gente con decisión y con el coraje a romper estereotipos culturales.

El documental expone las respuestas de varios interpretes que describen lo que es el jazz como música.Transmiten esa impronta a sumergirse en lo desconocido.También nos hablan vecinos del lugar que expresan su imparable necesidad de cultivar ese germen disruptivo que “La casa” alimenta en todas sus expresiones.

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Figuras tan importante como Escalandrum o el mismísimo Lito Nebia reafirman el placer de generar en este espacio físico la magia de esta música llena de virtuosismo instrumental e  improvisación, pero que como un mantra parce invadir al oyente y no dejarlo.

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Verdaderamente ver el documental es motivador, lo sonidos se deslizan por un territorio quizás ajeno, donde la emoción de los artistas y responsables de lugar, lo hacen posible. Cada rostro frente a cámara revela el placer de la construcción colectiva. El lugar se muestra con la calidad necesaria para cualquier sonido o espectáculo y así lo confirmo la presentación del grupo Suizo NO Square.

No Square y Latin American Tour 2012

El reconocido cuarteto suizo de jazz, oriunda de Lausanne es la unión de cuatro fuertes personalidades, pero su vinculo con argentina tiene dos protagonistas: uno de sus músicos está en pareja con una argentina. No Square nació en 1994 y fue modificando su formación; instrumentación e integrantes a lo largo del tiempo. El proyecto editó ocho discos.. La banda ha participado de festivales como el de La Habana -invitados por Chucho Valdez- y otros de: Suiza; Alemania; Francia; Polonia; Chile; Uruguay y Argentina.

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Latin American Tour 2012 fue la plataforma que hizo que el grupo tocara en varios escenarios del país y sobre todo del conurbano bonaerense, uno de ellos fue el 21 / 7 en el Jazz Festival Claypole en La Casa.

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Para esto los músicos fueron alojados en casas de vecinos e interactuaron con su potenciales oyentes en un intercambio de sensaciones y miradas, que hizo del evento mucho mas que una presentación musical. Fue todo una evento sociocultural que dejo al bario en ebullición, por lo que son capaces de generar desde su mismísima pertenencia y a partir de un lugar como «La casa».

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“La casa”  Jazz en claypole nos habla de como las fronteras culturales se imponen artificialmente.Nos muestra un pueblo que lejos de las movidas culturales, construye la propia y se anima al riesgo de impulsar sonidos que abran nuevas puertas que jamas se cierren.

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Pablo Kulcar
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